Los problemas hogareños están por todas partes. Nuestra casa es un sitio feliz donde nos sentimos seguros y a gusto, pero también puede ser un lugar en el que se combinen nuestras peores pesadillas, encontrando multitud de problemas en cualquier detalle, desde lámparas que se funden hasta atascos en el fregadero. Y hemos de estar preparados para cualquier contratiempo, para poder solventarlo rápidamente y conseguir que todo vaya genial… hasta la próxima urgencia. Dentro de lo que cabe, el atasco en un fregadero no suele ser algo tan grave, y de hecho en la mayoría de ocasiones podemos incluso solucionarlo por nuestra cuenta, sin tener que llamar a un fontanero ni nada de eso. Solo debemos ser conscientes de cómo hacerlo.
Y es que al final uno debe convertirse en un manitas para arreglar las cosas de casa, porque si tenemos que llamar a alguien cada vez que algo se rompa, se funda o no funcione como debe, nos vamos a dejar el sueldo del mes solo en eso. Es por ello que debemos buscar la mejor manera de desatascar nuestro fregadero por nuestra cuenta, siguiendo estos sencillos consejos que vamos a dejarte por aquí. Como decimos, en la mayoría de casos no es nada excesivamente complicado, y cualquier con un poco de maña y mucha paciencia podrá lograrlo. Si ves que la situación se complica, por supuesto, no dudes en acudir a un profesional, pero al menos inténtalo por ti mismo antes, para demostrarte también que eres capaz de solucionar las cosas de tu hogar.
Qué necesitas para lograrlo
La fórmula que vamos a utilizar es tremendamente sencilla así que solo vamos a necesitar un poco de bicarbonato de sodio y algo de vinagre. Así de simple, así de eficaz, ya que la reacción de ambos ingredientes dentro de nuestras tuberías servirá para eliminar los posibles atascos que tengamos, siempre que sea algo relativamente sencillo y liviano. Podemos también utilizar una desatascador, si tenemos uno bueno en casa, aunque a veces esto suele ser incluso más complicado por toda la fuerza que necesitaremos para bombear el agua dentro del propio fregadero, y que sea ella misma la que se encargue de limpiar el camino a través de las tuberías, para que todo quede perfecto allí dentro. Nosotros optaríamos, eso sí, por la primera opción, la de la mezcla de bicarbonato de sodio y vinagre.
Cómo se desatasca un fregadero
Solo tenemos que tener cuidado a la hora de realizar la mezcla en sí porque es realmente eficaz. Cuando se mezcla el sodio con el vinagre se produce una reacción muy espectacular, a través de la cual se crea una espuma que lo va llenando todo, y que poco a poco va decreciendo luego. De hecho, si metemos a la vez media taza de vinagre con otra taza de bicarbonato por las tuberías del fregadero y luego le metemos un poco de agua hirviendo, la solución resultante comenzará a crecer dentro de las tuberías. Es por eso importante colocar rápidamente el tapón para evitar que salga por arriba. Así toda la tubería se “inundará” de este tipo de reacción y su propia acción hará que los restos de comida que puedan atorar el fregadero se despeguen para que todo quede limpio como una patena. Se acabó el atasco, y de una forma muy sencilla y eficaz.
¿Realmente la Coca Cola puede servirte?
Hay mucha leyenda urbana en torno a las cualidades que tiene esta bebida refrescante para desatascar tuberías, y por una vez, parece que esas leyendas sí que son ciertas. Y es que la Coca Cola, por sus propios componentes, tiene un factor relativamente corrosivo que ayudará a desatascar las tuberías de nuestro fregadero, si es que están llenas de restos de comida que no dejan pasar bien el agua. La solución es muy sencilla: solo tenemos que coger un par de vasos de agua mezclados con el refresco y echarlos por el propio desagüe. Esperaremos una media hora a que la mezcla haga su cometido, y probaremos para ver si el atasco ha desaparecido. En caso de no ser así, repetiremos el proceso. Nosotros, sin embargo, recomendamos mucho más el anterior, el del vinagre y el bicarbonato.
Consejos para evitar que vuelva a atascarse
Desatascar un fregadero, como ya hemos visto, no es demasiado complicado si sabemos cómo hacerlo. Sin embargo, como se suele decir, es mejor prevenir que curar, y si podemos evitar que el fregadero se atasque, mejor que mejor. La verdad es que no resulta demasiado complejo conseguirlo siempre que sigamos unos consejos bastante obvios, pero que luego mucha gente pasa por alto. El primero de ellos, por supuesto, no dejar restos grandes de comida en el propio fregadero, porque pueden caer en el desagüe y adherirse a las paredes de la tubería conformando así la primera parte del atasco. También es recomendable no echar grasas ni aceite, ya que pueden ser corrosivos para la propia tubería y dañarla bastante.
El fregadero debe estar solo para el agua, así que tendremos mucho cuidado a la hora de limpiar los platos con restos de comida, o incluso con pequeños plásticos o piezas que puedan tener. Igualmente, mantendremos limpio el fregadero para que no se vaya acumulando suciedad ni cal, que es otra de las cosas que suele provocar este tipo de atascos. Conviene igualmente realizar el proceso del vinagre y el bicarbonato cada cierto tiempo, por ejemplo, cada cuatro o cinco meses, si empezamos a notar que el fregadero se está atascando más de lo común. Así también evitaremos que la cosa pase a mayores y mantendremos el control sobre las tuberías, para no tener que llegar en ningún caso a necesitar la ayuda de un profesional. Eso que nos ahorraremos, por supuesto.